Durante nuestra vista a Viveros Sánchez, situado en Guadalajara, hablamos con Rafa, Ingeniero agrícola y responsable de campo de Viveros Sánchez. Rafa pertenece a la tercera generación de la familia Sánchez, y actualmente, junto a su primo, son los gestores del vivero Español referencia de Europa. Viveros Sánchez empezó siendo un pequeño vivero de fruta en Sabiñán, cuna de los principales viveros de árboles de España, nombrado el pueblo de la fruticultura de España. El motivo es que, durante la ocupación Morisca de Iberia, los conquistadores enseñaron a injertar a la población local, y desde entonces aplicaron las técnicas aprendidas y desarrollando el cultivo en la zona. A lo largo del tiempo y con el paso de las generaciones se ha convertido en uno de los viveros referencia de Europa, tras situarse en Guadalajara, Madrid.
Rafa nos explica que actualmente tienen unas 200 hectáreas, aunque han llegado a tener 300. El temporal Filomena en 2021 hizo mucho daño a diversas partes del vivero y aún no han podido recuperar la superficie total cultivable. En estas hectáreas tiene aproximadamente 1,3 millones de árboles, aproximadamente. Nos comenta que trabaja con una densidad de árboles de entre 6 y 7 mil árboles por hectárea.
Su vivero provee a las principales empresas constructoras españolas que, al diseñar proyectos cuentan con los árboles de Viveros Sánchez y los jardineros madrileños para aprovisionarse. Nos explica que Madrid es el punto de venta de árboles de España, más que Barcelona. Y en su vivero tiene centenares de especies diferentes donde también tiene una zona enfocada a la venta al público.
Entrevistador ¿Que te llamó la atención del Agilo? ¿Qué te hizo querer probarlo?
Rafa: Recibí una propaganda de que ibais a exponer en FIMA Zaragoza, justo antes de empezar la pandemia. ¡De hecho, estuve a punto de suspender el viaje! Al ver el Agilo quise verlo en persona ya que llevábamos mucho tiempo buscando un producto que sujetara las plantas, para evitar que se movieran y que no las rozase, ya que, si una planta de venta está rozada por la zona de sujeción su calidad se ve mermada. Llevábamos mucho tiempo probando muchísimos materiales y no conseguíamos dar con el producto adecuado. Lo probamos y tras un año haciendo test, vimos que funcionaba perfectamente y nos pusimos en contacto con ARaymond para hacer el primer pedido. La verdad es que estamos muy satisfechos con el resultado.
Entrevistador: Actualmente tienes unos 15.000 Agilo en tu vivero principal ¿Cuál es el elemento que te ha hecho repetir compra?
Rafa: Hemos analizado los resultados del uso del AGILO, y hemos observado que donde los hemos probado, el porcentaje de planta caída ha bajado de forma muy considerable, cuando con las otras soluciones, al soplar viento, se rompe el macarrón de plástico y la planta se cae. Estas caídas suponen dedicar el trabajo de 3-4 personas de toda una mañana a levantar árboles, con lo cual al final de año representaba un coste muy elevado para el vivero en jornales. Con la gran reducción de porcentaje de planta caía estoy muy contento.
Entrevistador: ¿Qué porcentaje de planta caída tienes actualmente con el Agilo?
Rafa: Tenemos unos 20 mil Agilos en la actualidad, mirando atrás y analizando la actuación del Agilo puedo afirmar que el porcentaje de árboles caídos ha disminuido considerablemente, cuando con las otras soluciones, observábamos que los troncos quedaban marcados y arañados en el mejor de los casos, incluso muchos de ellos vencían a causa de los fuertes vientos y del desgaste del material bajo las inclemencias meteorológicas.
La caída de los árboles implica un impacto económico negativo a final de año para nosotros, además de dedicar el trabajo de 3-4 personas durante una mañana entera en levantar árboles, La verdad que desde que usamos el Agilo, el viento no nos preocupa.
Entrevistador: ¿Tienes intención de volver a comprarlo?
Rafa: ¡Si! ¡Evidentemente! Mi idea es cambiar todo el vivero a poco a poco, así en 4 años tendré todo el vivero sujeto, además al ser reutilizable y tener un ciclo de vida elevado, el retorno de la inversión mejora la alternativa del atado cada año.
